how do I pray?

Hola hola, espero que hayan tenido un verano espectacular y lleno de bendición. Estoy muy feliz de anunciarles que estaré compartiendo más contenido relacionado a mi fe. Siento que es un tema del que se necesita hablar más y me gustaría compartir un poco de lo que se. Mi fe me ha ayudado demasiado a desarrollarme como persona y como profesional. Sin más preámbulos, vamos con el tema de hoy.

Creo que una de las preguntas que más me hacía con respecto a mi fe era: “¿Cómo puedo orar?”. Antes de saber cómo es importante entender que es la oración, ya que muchas veces puede sonar como algo denso o complicado. Orar es una conversación entre tú y el Padre. Nosotros hablamos y Él escucha, es capaz de escuchar hasta los deseos más íntimos de nuestro corazón. Es una conversación libre de prejuicios, una fundamentada en amor y confianza. Es un diálogo que debe llevarse a cabo siempre, no solo cuando nos encontramos en apuros. Es estar en sintonía con nuestro Padre y conectar con Él.

Ahora que sabemos lo que es, les cuento como lo hago yo. Hay muchas maneras de orar, podemos cantar, danzar, rezar oraciones particulares, etc. Cuando oro, me gusta que sea una conversación between friends, una con mucha confianza. También me gusta recordar estos detalles:

- Agradezco: me encanta pensar en todo lo que tengo y dar gracias. Pienso en situaciones o personas que lleguen a mi corazón, trato de dejar fuera todo lo material. Me encanta dar gracias por todo aquello que recibo a diario, por los momentos y las bendiciones.

- Pido Perdón: Muchas veces pecamos y no representamos la imagen viva del Padre. Nada como mostrar arrepentimiento y pedir perdón por todos nuestros pecados. Primero en la oración y luego en la confesión para recibir perdón por nuestros pecados.

- Ofrecezco: le ofrezco todo mi corazón y mis esfuerzos. Todo aquello que por su infinita bondad y misericordia he recibido. Le ofrezco mis planes futuros para que Él siempre me sirva de guía y compañero.

- Entrego: puede parecer similar a ofrecer, pero para mí es algo completamente diferente. Muchas veces nos sentimos agobiados o estresados por situaciones del diario. Muchas veces nuestro corazón se llena de preocupaciones que parecen no tener fin. En este momento, le entrego todo y le pido que tome el control.  Le entrego todo lo que puede estar inquietándome, para que sea Él quien sane todas las heridas y me ayude a continuar de su mano siempre.

- Pido: en la biblia el Padre nos dice: “Pidan y se les dará; busquen y encontrarán; llamen y se les abrirá. Porque todo el que pide, recibe; el que busca encuentra; y al que llama, se le abrirá… ¡Cuánto más el Padre de ustedes que está en el cielo dará cosas buenas a aquellos que se las pidan!” Mt 7, 7-11. Tomando a Mateo como guía, en este momento pido al Señor todo lo que mi corazón anhela. Todo aquello que sé que solo será posible de su mano. Tomando en cuenta que se cumpla siempre su voluntad y no la mía. Nuestro Padre es un Dios de amor y nos dará todo lo que nuestro corazón anhela. Pedir con fe, que si está en el plan de Dios para nuestra vida, se cumplirá. 

- Llévame: le pido que me lleve a donde tengo que estar, que me utilice como su instrumento y nunca me deje sola. Pido que siempre interceda por mí y mi familia, que nunca nos abandone.

- Me gusta pensar en todas las personas que forman parte de mi vida y son especiales para mí. Aprovecho ese momento para pedir por ellos, para que el Padre nunca los abandone y siempre los ilumine. Pienso en todas las personas que no creen y no conocen de Dios para que en algún momento de sus vidas tengan un encuentro con Él. Pido por las personas que se sienten perdidas, para que encuentren en Dios el camino, la verdad y la vida.

- También hay momentos en los que las palabras sobran y lo que queremos es estar en silencio y disfrutar de un tiempo a solas con Dios, estos son los momentos más hermosos, son los momentos en los que Dios nos habla y entra en nuestros corazones.

Recuerda que la conversación con Dios la creas tú, esto son solo las cosas que yo hago y me funcionan. 

With love, Gaby.